Frente a otras regiones que han dominado desde hace décadas el panorama nacional del vino, …
El nombre de Fuego lo dice todo. Aquí el fuego, la brasa y el humo mandan. Si lo combinamos con los mejores productos de temporada y mucha pasión el resultado es de 10. Este local, que comenzó su andadura a comienzos del 2017, acaba de cambiar de dirección pero manteniendo su esencia. Al frente de los fogones está ahora la joven Loreto Villaverde, socia junto al grupo hostelero Garden Navarra, con mucho camino abierto en la capital (Tierra del Queiles, Kontiki, La Tasca Suprema y Chigre).
Fuego cuenta con una carta muy equilibrada y apetecible, con platos sencillos que enfatizan la materia prima y elaborados con mucho mimo. Así, en plena primavera, -y con los orígenes navarros del grupo- las verduras tienen un gran protagonismo, destacando recetas como los Puerros a la brasa con mahonesa ligera de tartufo, o las Alcachofas de Tudela a la brasa con romescu. Otros entrantes irresistibles son los Mejillones de Normandía a la brasa con salsa marinera, la Ensaladilla Fuego con ventresca, el Tomate feo de Tudela -la variedad va cambiando- con ventresca y cebolleta fresca de la Mejana o el Pulpo a la brasa con su tinta.
Para continuar cuentan con productazos que solo pasándolo por la parrilla y sirviéndolo en el punto exacto son éxito asegurado: rodaballo, chipirón, solomillo de vaca rubia, lomo madurado… Quienes prefieran algo más elaborado, pueden decantarse por su Arroz con verduras y costillas ahumadas, el Bacalao con salsa crema de pimientos asados ahumados o el Rabo de vaca en demiglace con verduritas y patatas primor… También cuentan con una nutrida y cambiante lista de sugerencias del día a la que es obligatorio ‘pegar la oreja’.
Para terminar, que nadie se vaya sin probar los postres, entre los que no falta la Tarta de queso, pero ¿qué tal si variamos y probamos una original y poco frecuente Pavlova o la deliciosa Tarta de limón con merengue italiano? 100% clásica, muy acorde con la decoración que nos traslada a la campiña inglesa. Y es que el coqueto salón, con sus preciosas paredes de papel, las lámparas de araña y la cocina vista, ya merece de por sí una visita.
Otra opción es sentarse en su bonita terraza, con horario ininterrumpido de 12 de la mañana a cierre, para empezar con el aperitivo y terminar disfrutando de una copa tras la cena. Un espacio que cuenta además con una carta ‘propia’ -disponible en horario de cocina- en la que, a los entrantes del restaurante, se suman sabrosas opciones como los típicas Croquetas de ibérico, una irresistible Hamburguesa a la brasa o la Chistorra de Arbizu… para acompañar estos platos, variedad de ensaladas y algunas tostas… ¿Nos sentamos dentro o fuera?