Jorge Blass: «Los magos materializamos deseos»

10 febrero 2015

jorge blass madrid a tu estilo 2

Jorge Blass, probablemente nuestro mago más internacional, recibe a Madrid a tu estilo en el barrio de Ciudad Lineal donde creció de niño y donde sigue creciendo como profesional de la varita. Su estudio está lleno de aparatos y utensilios mágicos que han formado o van a formar parte de sus espectáculos. Libros de ilusionismo, conejos y chisteras, cartas, muchas cartas. Un gran póster del maestro Houdini, una levita, cajas con un letrero donde se lee “Flores”, una gran urna tapada con una tela de terciopelo rojo. Si eres amante de la magia es imposible que nada de esto llame tu atención.

 

Entrevistar a un mago en pleno proceso creativo es un privilegio muy ilusionante. Jorge está preparando su próximo espectáculo en Madrid. Será en el Gran Teatro Caser Ruedo de las Ventas, el próximo domingo 15 de febrero en dos funciones únicas. Y nos  confiesa que todavía anda a vueltas con alguno de los números. Es una gran responsabilidad hacer magia en un espacio que está tan cerca del barrio que te vio crecer.

 

Nacido en Madrid en 1980, ¿cómo recuerdas tu infancia en la capital?

Recuerdo muy buena infancia en el barrio de Ciudad Lineal. Cuando entré en la magia empecé a actuar en la calle Fuencarral en un lugar mítico que se llamaba Houdini y ahí yo iba en el autobús 146 que me llevaba hasta la Gran Vía. Siempre me gustó callejear por Madrid y encontrar lugares especiales. Mi infancia fue entre barajas, también me dio por el fútbol, me metí a la pintura, estudié música… la verdad es que fui un poco inquieto.

 

A los 12 años ya realizaste tu primer acto de magia pero, ¿cuándo descubriste realmente que amabas la magia?

Mi primer recuerdo es a los 6 años, que estaba viendo la tele y vi un programa de Tamariz que se llamaba Magia Potagia y tenía una carátula muy chula en blanco y negro, una cantante que cantaba una canción y de repente unas manos hacían magia. Luego he conocido esas manos que eran de Joaquín Navajas, que después fue profesor mío… Pues bien, aquellas manos hacían magia y apareció un mago,  el gran Arturo de Ascanio, maestro de Tamariz,  hizo un truco con una carta que consistía en un carticidio, en romperla en trocitos y luego la recomponía. Yo me quedé pegado al televisor con 6 años y me impactó tanto que cogí una baraja de mi padre y empecé a probar el truco una vez y otra vez, repetía exactamente lo mismo una carta tras otra y me cargué toda la baraja. Estaba convencido de que la magia se podía hacer. Luego pasó el tiempo y a los 12 años me picó el gusanillo otra vez y empecé con los fascículos de El mundo mágico de Tamariz y fue una pasada: empecé a descubrir los trucos,  me fabricaba mis propios juegos… se convirtió en una pasión en toda regla. De hecho a partir de ahí visité la tienda de Encarnita que aparecía en los fascículos. Fui a la calle San Mateo con mi madre un sábado y estaba cerrada pero volví el lunes según salí del colegio y descubrí lo que era un palacio para mí, con las vitrinas llenas de juegos, de libros, donde estaba Encarnita, que ahora se ha retirado, que te aconsejaba todo lo necesario.

 

¿Le compraste algo?

Recuerdo que compré la cuerda tricolor que eran tres cuerdas que se unían y luego aparecían como una sola, y el libro Esto es magia de Moliné, que todavía conservo. Fue importantísimo que esta mujer me guiara.

 

Tú que creciste aprendiendo los trucos de la magia más convencional, ¿crees que han conseguido huir de los convencionalismos de la magia tradicional o por el contrario piensas que se está volviendo al origen de todo?

Yo empecé haciendo magia clásica, que es importante porque con eso tienes la técnica, las herramientas o la base para poder luego evolucionar.  Pero creo que ahora hay un reto en la magia y es lo que en mi espectáculo intento superar que es el dar un paso más adelante, el innovar, el proponerle al espectador algo que no espera. La magia tiene 5 ó 6 principios: puedes hacer apariciones, desapariciones, levitar, teletransportarte, puedes suspender algo en el aire, puedes adivinar el pensamiento… Esto se puede conjugar pero lo importante es cómo lo haces. Si un truco que hace cien años lo hacíamos con un conejo y una chistera yo puedo hacerlo ahora con un teléfono móvil creo que es mucho más interesante. Al final los magos intentamos materializar deseos del público y lo hacemos en el escenario cumpliendo el deseo de volar, de hacerse invisible, y la gente con eso se fascina. Pero sí que el lenguaje, la estética, la puesta en escena tiene que ser muy renovada y muy actual que pueda atrapar al espectador de hoy día, que es mucho más escéptico. El espectador de Houdini hace cien años era mucho más fácil de engañar, ahora la gente tiene muchas herramientas, internet en la palma de su mano, por eso los magos tenemos que ir un paso más allá y sorprenderlos.

jorge blass madrid a tu estilo

Quizás con esta menor capacidad de sorpresa de los espectadores, ¿piensas que hay algún límite ahora mismo en la magia?

[Se ríe] No hay límites creativos. Y cuando piensas que hay algún límite surge un mago y te demuestra lo contrario. Una de las cosas que más me han impactado últimamente es un truco de un mago americano que se llama Kevin James, que es buen amigo mío. Hizo un número que consistía en cortar a una persona con una motosierra y de repente había unas piernas y un cuerpo separados que la gente podía tocar… ¡y eso es algo imposible! Eso se lo enseñas a un mago de hace cien años y se cae para atrás. Lo bonito es que no hay límites, la imaginación vuela y aquello que puedes imaginar lo puedes hacer realidad con magia, con una técnica, con un arte secreto… pero el público lo que ve es el efecto final.

 

En cada espectáculo sueles incluir un número nuevo y hace poco nos sorprendiste con el de los amigos de Facebook donde mágicamente en el teatro un espectador al azar termina encontrándose con un amigo suyo de su lista de amigos de la red social. ¿Cuál es el proceso creativo de un truco como esto, cuánto tiempo te lleva desde que lo piensas hasta que lo haces realidad?

Depende un poco de caso, pero en este caso estuve como dos años pensando en la idea pero no daba con cómo hacerlo y lo dejé. Y unos años más tarde en una conversación con mi equipo llegamos a una idea que podía ser viable, entonces lo recuperé y me puse una meta de tres meses y en ese tiempo lo construimos todo, hicimos toda la producción e hicimos una primera versión que presentamos en mayo de hace tres años en el Teatro Tomás y Valiente de Fuenlabrada. De esa versión hasta ahora ha cambiado muchísimo y sigue cambiando. Entonces habrán sido unos cuatro años desde que surgió la primera idea hasta ahora. Lo bueno es que es un espectáculo vivo, cambia en cada función, no es como un concierto que ya está escrito y se interpreta.

 

Si te pregunto si merece la pena tanto esfuerzo probablemente me digas que sí [se ríe]. Pero dime, desde el fondo de tu corazón, si es cierto que merece la pena, ¿por qué te compensa tanto trabajo?

Si tú piensas todo el trabajo que tiene, pues la verdad es que no interesa, ¿para qué trabajar tanto en eso? Solamente si te gusta, si te apasiona. El problema es que cuando te dedicas a una pasión, ya no trabajas nunca más. En mi caso, el ponerme a pensar magias, a leer libros… es que es mi vida, la verdad es que no diferencio mucho entre vida personal y trabajo porque las dos cosas me gustan y no hay una barrera que las separe. Entonces hay veces que hay shows muy complicados y les dedicas muchas horas y no es rentable ni económicamente ni a nivel de satisfacción porque a veces no lo consigues, pero es parte del juego. Al final te dedicas a tu pasión y eso se transmite al público. Mi maestro Tamariz dice una cosa muy chula que es que cada magia tiene siete velos y uno de ellos es las horas de esfuerzo y dedicación. Si tú has dedicado mucho tiempo a desarrollar un juego, cuando lo presentes al público de forma subconsciente les estás transmitiendo todo lo que le has dedicado. Es como una obra de arte al final. Tú dedicas el tiempo y la gente lo vive, vive cuando has aprendido el truco diez minutos antes o cuando llevas 5 años haciéndolo. Se trata de ser profesional de tu oficio, yo dedico todas las horas posibles porque es lo que me gusta.

 

El 15 de febrero te podemos ver en La Ventas en un escenario muy especial, cuéntanos algo sobre este nuevo número, ¿con qué nos vas a sorprender?

En Las Ventas han creado un teatro, ¡que aviso que no es al aire libre, no hace frío! Es un sitio muy chulo. Se trata de un show especial que hemos preparado con algunas grandes ilusiones y con efectos que yo no suelo hacer pero como es un teatro muy grande vamos a preparar una puesta en escena más espectacular, va a haber bailarinas, efectos visuales, transformaciones, vamos a cortar a una persona por la mitad…

 

O sea que vuelves al origen…

Ja, ja, sí pero lo vamos a hacer con una caja transparente, con lo cual va a ser una innovación. Aparte de una selección de mis mejores magias, de las magias que más me gusta hacer, he incluido varios efectos de gran ilusión. Las grandes ilusiones son esa especialidad donde hay efectos grandes con personas que aparecen, desaparecen, se transforman.  Y van a ser solo dos únicas funciones porque el teatro lo desmontan el día 16 y la verdad es que es un sueño actuar dentro de la plaza de toros. Como vivo en Ciudad Lineal desde niño, pasaba siempre con el autobús y veía la plaza desde el autobús  y ahora pensar que voy a actuar ahí, donde actúan los grandes… es un lugar especial.

banner festival internacional de magia madrid

Pues a ver si hay lleno… Además es el quinto año que diriges el Festival Internacional de Magia, este año bajo el lema «Tiempo de Magia», y podremos ver de nuevo juntos en el Teatro Circo Price de Madrid a algunos de los mejores magos del mundo. Y eso es todo un privilegio…

Lo bueno es que es un show efímero. Lo que sucede en ese festival ya no vuelve a suceder, esa combinación de varios artistas. Es muy interesante el reto artístico de cada año preparar un show que tenga sentido , que tenga su historia y con magos que se juntan para esta ocasión, es una especie de polifonía mágica. El primer año fue una semana, el segundo ampliamos a dos, el tercero tres semanas, el cuarto cuatro semanas y este año el quinto, ¡cinco semanas! El 5 de marzo comienza la primera semana con “Magia de cerca” en la Sala Paris, en la trastienda del Price, con un aforo de solo cien personas. Tenemos a la maga Inés, que hace magia de cerca muy fresca y muy interactiva; a Derek Delgaudio, un mago americano que también es guionista y de hecho está trabajando con Neil Patrick Harris para la gala de los Oscar; y tendremos también al mago toledano Woody Aragón. Del 11 de marzo al 5 de abril es la gala de escena, con seis artistas internacionales fantásticos, con ilusiones muy potentes, con música, con prestidigitación, magia cómica…

 

Háblame de tu experiencia dirigiendo este espectáculo, porque estar rodeado de los mejores magos del mundo, entre los que tú figuras, debe de ser interesante.

Ser mago y convertirte en director de una gala es una pasada porque te metes totalmente dentro del espectáculo y además es una auténtica gozada traer a Madrid magos de este nivel y que la gente pueda ver sus números. Por otro lado yo tambiñen estoy preparando un número inspirado en el “Árbol de la vida” del mago Houdin, un autómata del siglo XIX que es todo un reto para mí,  así que espero sorprender a los madrileños que se acerquen esos días al Price.

 

¿Crees que en España se valora la magia o te sientes mejor valorado en otros países como Estados Unidos?

Lo que tiene Estados Unidos es una gran cantidad de público al que sorprender, un público con auténtica pasión por la magia. En agosto por ejemplo viajaré a Las Vegas para dar una conferencia sobre el truco de Facebook. Hay mucha curiosidad. En España la magia está atravesando ahora un buen momento, el público acude a ver magia. yo mismo lo compruebo con la venta de entradas de mis espectáculos. Lo que sí veo es que para fomentar la magia es necesario que primero se haga desde la propia administración donde la magia está más reconocida a nivel teatral. Haría falta que fuera una especilidad escénica por sí misma, como lo son los títeres por ejemplo, para que recibiera más ayudas y se la tratara de forma independiente al teatro.

 

Eres además un mago involucrado, solidario. Acabas de volver de Perú de actuar en colegios con la Fundación Abracadabra, ¿son más agradecidos los niños o los adultos?

La verdad es que en Perú estaba de vacaciones pero aproveché el viaje para poder repartir un poco de magia entre los niños de allí. Los niños son mucho más difíciles que los adultos porque estos tienden a ser más prudentes, no son tan directos. Yo tengo claro que si ilusionas a un niño al adulto te lo llevas de calle. De la Fundación Abracadabra soy patrono y algunos piensan que presidente, pero ese papel se lo dejo a Juanjo García. Este 2015 la Fundación cumple diez años, diez años de visitar hospitales una vez al mes y hacer magia para devolver la ilusión a decenas de niños. Es un trabajo realmente gratificante.

 

¿Cuál es ahora mismo tu mayor reto profesional?

Pues sin ir más lejos, tengo que terminar de perfilar el autómata del «Árbol de la vida» de Houdin que voy a representar en el V Festival Internacional de Magia. Estamos trabajando duro con él pero todavía no termina de salir bien, asi que tengo estas semanas por delante para perfeccionar el truco y sorprendes a los espectadores.

 

Para finalizar recomiéndanos un sitio donde ver magia de la buena en Madrid.


Pues hace poco que Ana Tamariz, la hija de mi maestro, ha empezado a organizar shows  de magia en el espacio Juan Tamariz de la sala Galileo Galilei. Es un espacio muy mágico en un rinconcito de la sala donde se puede disfrutar de la magia de cerca de auténticos profesionales del ilusionismo. Los pases son para muy pocas personas y merece mucho la pena porque es un lugar realmente mágico.

JORGE BLASS EN LAS VENTAS
Gran Teatro Caser Ruedo Las Ventas
Domingo 15 de febrero, 17 y 20 horas
Entradas desde 15 euros
Venta online: https://proticketing.com/nocheenlasventas/es_ES/entradas/evento/2778

Texto y fotos: Lorena Gracia (@paragracialamia)



Post a new comment