ARTISTIC METROPOL: HAY PELÍCULAS QUE SOLO VERÁS AQUÍ

Por fuera, con un escaparate repleto de pósteres, podría pasar por un videoclub de esos que ya no abundan. Por dentro, una máquina de hacer palomitas y una sala de apenas 80 butacas nos recuerda a un pequeño cine de barrio. Pero Artistic Metropol es algo más. Aquí se estrenan películas que no verás  en ningún otro cine de Madrid (y mucho menos en multisalas). Mientras haces tiempo hasta la hora del comienzo, puedes disfrutar ojeando las estanterías de libros y DVD.  Y cuando termina el pase, te preguntan si te ha gustado y te regalan, si estás dispuesto y te apetece, una buena charla de cine.

Alberto Fernández, socio de Artistic Metropol. Foto: Irene del Cerro

Álberto Fernández es uno de los cinéfilos que encontrarás en la taquilla de Artistic Metropol. Hoy es socio de este negocio, pero hace apenas unos meses era un aficionado más. Venía tantas veces al Artistic y disfrutaba tanto de esa charla cinéfila de después de la peli, que el dueño acabó por ofrecerle la oportunidad de formar parte de este proyecto.

Artistic Metropol comenzó como sala de cine independiente centrada sobre todo en el género fantástico y de terror, y más tarde ampliaron su oferta. Según nos cuenta Alberto, podría decirse que aquí «tienen cabida todos los posibles candidatos a ganar el premio Indie a mejor película». Cintas no comerciales demandadas por un público cada vez más amplio. Sirva como ejemplo el estreno de la película Asier y yo (Asier ETA Biok, 2013). Este documental sobre la amistad entre el etarra Asier Aranguren y el propio director consiguió llenar la sala durante tres días seguidos y permanecer en cartel varias semanas. Un cine que a juicio de Alberto está un poco más protegido frente a la piratería porque «las salas pequeñas programamos cosas que como no son comerciales, no se van a molestar en entrar con una cámara».

Con el tiempo, Artistic Metropol ha crecido y se ha convertido en una sala multidisciplinar donde también acogen otro tipo de espectáculos como el Le petit comité de los viernes, un grupo de cómicos, o el mentalista, que previsiblemente empezará a jugar con la mente de los espectadores los sábados.

Un local diferente que busca ‘hacer ver a la gente que no solamente vamos a poner cine, si no que vamos a intentar sorprenderles’.

Texto y fotos: Irene del Cerro